Asunción: Rebelión individual del trabajo doméstico
Por Alba Yaneth Niño
[textmarker color=»F76B00″ type=»background color»]RESEÑAS[/textmarker]

.

.

.

.

Asunción es un cortometraje dirigido por Carlos Mayolo y Luis Ospina, y producido por Caligari en 1975. Relata la rebelión de una empleada doméstica en la casa de una familia de clase media en Bogotá. La protagonista de la historia fue, en la vida real, la empleada doméstica de la familia de Carlos Mayolo. Según Luis Ospina (1), este cortometraje se realizó para circuitos comerciales de distribución, sin embargo fue censurada y no se pudo exhibir en ese momento.

Esta película muestra las desigualdades de género y clase social que juegan en contra de una empleada doméstica. Desigualdad de clase social porque el trabajo doméstico está mediado por relaciones de poder verticales entre mujeres de clase media, generalmente blancas y heterosexuales, que subordinan a otras mujeres pobres, campesinas, indígenas o afrodescendientes. Y desigualdad de género porque históricamente se ha naturalizado el trabajo doméstico como una actividad de las mujeres por valores o ideales de la feminidad, como el cuidado hacia los otros, el sacrifico, el romanticismo, la procreación, entre otros.

La historia de la película se desarrolla en la relación jerárquica entre la patrona de la casa y Asunción, la empleada doméstica. El título del cortometraje alude a la protagonista de la historia, otorgándole agencia y posibilidades de subvertir temporalmente su situación laboral. El personaje se revela trasgresor a la tradición de víctima, al aprovechar la ausencia de sus patrones para tramar su venganza, aunque en la primera parte vemos un personaje parsimonioso, obediente y sumiso. Asunción es un personaje que decide revelarse al orden de clases sociales, y que, entre sentimientos de identificación y resentimiento, abandona su trabajo.

Fotograma Asunción. 1975. Dir. Luis Ospina y Carlos Mayolo. Archivo Fundación Patrimonio Fílmico Colombiano
Fotograma Asunción. 1975. Dir. Luis Ospina y Carlos Mayolo. Archivo Fundación Patrimonio Fílmico Colombiano

La señora de la casa es quien imparte órdenes y controla el trabajo doméstico de Asunción -no es el señor de la casa -. Esta patrona desconfía del trabajo de la protagonista pues de éste depende un nivel de vida oneroso para su clase social. Un cuidado que está en las manos de alguien que ella ve como gente de dudosa procedencia; prejuicio que legítima la desigualdad de clase social por falta de educación y poder adquisitivo, justificando el cuidado del otro, el ser empleada doméstica, como el destino de las mujeres pobres. Ese otro se cosifica, animaliza, o como dice Daniel Flórez y Pedro Adrián Zuluaga, “Asunción es una sinécdoque de esa Otredad que alternativamente, en el orden social, puede tomar las formas de lo primitivo, el negro, el homosexual, el judío o el comunista”(2). La clase alta se alimenta del sacrificio y la humillación que se ejerce a las clases populares.

Al principio de la película, una voz en off masculina divulga la importancia de la igualdad de clases sociales, y señala que no hay seres superiores sino que todos somos iguales. Este discurso marca una distancia entre la realidad social y la igualdad formal, ante la ley de una sociedad democrática. El trabajo doméstico se ha naturalizado históricamente como una actividad de predominantemente femenina, que ha servido a los estados-nación capitalistas para incrementar su riqueza y mantener el sistema patriarcal.

Una escena que nos puede remitir a lo gótico – o más puntual aún: al Gótico Tropical – muestra a Asunción derramando su sangre sobre la salsa para el pescado. Simbolizando a los patrones de Asunción como vampiros chupa sangre que viven cómodamente gracias al servicio de la empleada doméstica. Así como la mezcla racial en este país ha sido construida por diferentes clases sociales, donde las altas subordinan a las bajas, sin reconocer su aporte a la construcción de la riqueza, la salsa parece que no se mezcla y aparenta permanecer blanca, pero se nutre de la explotación laboral de las mujeres pobres, campesinas, indígenas, negras y afrodescendientes.

Por otra parte, Asunción aparece tomándose fotografías varias veces en la casa y en la plaza pública. La cámara fotográfica es una herramienta tecnológica, que en este caso retrata la emergencia femenina en la búsqueda de una identidad con derechos sociales y económicos, y acompañado de un acto de rebelión individual devela a las mujeres como sujetos de derechos. También es un testimonio de su venganza porque Asunción deja varias fotografías en la cámara de la familia. Asimismo una imagen en fundido negro presenta un disparo fotográfico para retratar al espectador, a la cuarta pared, aunque la escena simula que los personajes manipulan la cámara fotográfica como si estuvieran explorando o experimentando.

.

Fotograma Asunción. 1975. Dir. Luis Ospina y Carlos Mayolo. Archivo Fundación Patrimonio Fílmico Colombiano
Fotograma Asunción. 1975. Dir. Luis Ospina y Carlos Mayolo. Archivo Fundación Patrimonio Fílmico Colombiano

.

También se visualiza la radio como tecnología moderna de acceso cultural a las clases populares, y especialmente las radionovelas fueron programas creados para entretener a las amas de casa o trabajadoras domésticas, programas que idealizaban el amor romántico como un ideal femenino para superar las desigualdades de clase social.

Otro elemento que emplean para contextualizar la época es el televisor. En una escena, Asunción prende el televisor y el periodista menciona la expedición espacial Apolo de la NASA en 1969, teniendo como contexto político la guerra fría entre Estados Unidos y la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas. En esta misma escena se conoce la afiliación política de la familia de clase media al partido Conservador, con un slogan de la convención conservadora de 1959.

De igual manera la música es parte de la diversión de las clases populares. Suena la salsa como género musical tradicional de la ciudad de Cali, el cual ameniza el desorden, la parranda y celebra la libertad. Cabe anotar, que Cali es la ciudad natal de los directores Carlos Mayolo y Luis Ospina, quienes traen sus gustos musicales al cortometraje Asunción. También la comida y el alcohol son un privilegio en la fiesta, especialmente para las amistades de Asunción.

Fotograma Asunción. 1975. Dir. Luis Ospina y Carlos Mayolo. Archivo Fundación Patrimonio Fílmico Colombiano
Fotograma Asunción. 1975. Dir. Luis Ospina y Carlos Mayolo. Archivo Fundación Patrimonio Fílmico Colombiano

En esta misma tradición cinematográfica, el cortometraje ¿Y, su mamá que hace? (1981), cuenta cómo una ama de casa prepara y sirve el desayuno, baña y viste a su hijo, y atiende a su esposo, en una carrera contra el tiempo, mientras el esposo e hijo son receptores de cuidado. Esta película fue producida por Cine Mujer, un grupo de cineastas feministas que denunciaron la opresión del sistema patriarcal. También hicieron el documental Trabajadora Invisible (1986). En tanto, la película Pisingaña (1986) dirigida por Leopoldo Pinzón, muestra a una joven campesina abusada sexualmente por militares, que luego migra a la ciudad a una casa de familia, donde el patrón también abusa sexualmente de ella, apelando al afecto y la ingenuidad de la joven.

Esta temática también ha sido representada en varias películas Suramericanas, entre ellas: Zona Sur (2009) dirigida por Juan Carlos Valdivia de Bolivia, Señora beba (2004) dirigida por Jorge Gaggero de Argentina, y el documental Santiago (2009) dirigido por João Moreira Salles de Brasil. Estas películas visibilizan las relaciones ambiguas, afectivas y de poder entre las y los patrones y las empleadas de servicio doméstico y los mayordomos.

Como conclusión, se destaca que Carlos Mayo y Luis Ospina en el cortometraje de Asunción, se preocupan por las desigualdades de clase social y género, recrean un subversión femenina de uno de los trabajos más desprestigiados en la sociedad colombiana como el trabajo doméstico. Tiene una mirada femenina de agencia de la empleada doméstica. No es un personaje estereotipado o víctima de la opresión sino que con el abandono de sus quehaceres se rebela al servicio, al cuidado del otro, al orden de la familia burguesa y de la casa, en general se rebela al sistema patriarcal y capitalista.

.

 

.

Alba Yaneth Niño 
Trabajadora social con maestría en estudios de género y cinéfila.

.

.


1 NAVARRO, Alberto, “Entrevista con Luis Ospina”. Cinemateca, No. 1, Bogotá, julio 1977.
2 FLOREZ, Daniel y ZULUAGA, Pedro Adrián. “Mayolo padre nuestro” en Cuadernos de cine colombiano. Cinemateca Distrital. Bogotá. 2015. p.86.